ESPECIAL: En construcción primer depósito tras incendio en mayor base cubana de almacenamiento de petróleo

Imagen del 30 de marzo de 2023 de un obrero trabajando en la construcción de un depósito de petróleo en la Base de Supertanqueros de Matanzas, en la provincia de Matanzas, Cuba. Varias decenas de obreros se afanan el domingo en la construcción de un primer depósito de petróleo tras el gran incendio de agosto pasado que dañó cuatro tanques en la Base de Supertanqueros de Matanzas, la mayor instalación de almacenamiento de combustible en Cuba. (Xinhua/Joaquín Hernández)

Varias decenas de obreros se afanan hoy domingo en la construcción de un primer depósito de petróleo tras el gran incendio de agosto pasado que dañó cuatro tanques en la Base de Supertanqueros de Matanzas, la mayor instalación de almacenamiento de combustible en Cuba.

El nuevo depósito se erige para comenzar a suplir el déficit de 200.000 metros cúbicos de almacenaje provocado por el siniestro, que destruyó cuatro tanques de 50.000 metros cúbicos cada uno de la instalación, ubicada a unos 100 kilómetros al este de La Habana y al borde de la bahía de Matanzas.

El desastre ocurrió cuando una descarga eléctrica incendió un tanque que más tarde explotó y las llamas se extendieron a otros tres, lo que ocasionó cuantiosas pérdidas materiales y 14 desaparecidos, dos muertos y casi 150 lesionados.

Ahora, bajo el inclemente sol caribeño, varias brigadas trabajan en la fundición de la base del nuevo tanque, la que deben concluir en los próximos días para comenzar a montar el depósito, cuya capacidad será ligeramente inferior a los destruidos, pero similar en estructura.

El nuevo depósito, cuya construcción debe demorar unos 18 meses, también tendrá una membrana flotante interna de aluminio y un domo geodésico, pero contará con un sistema eléctrico soterrado que ofrecerá condiciones más seguras en el manejo del crudo.

También estará rodeado por un dique de tierra y hormigón, separado a unos 110 metros del tanque y que ante un accidente permitirá recoger una vez y media la capacidad del depósito.

"Estamos en la segunda fase del proceso de recuperación ya que en la primera etapa nos concentramos en demoler las instalaciones afectadas por el incendio y crear condiciones para la construcción de los nuevos tanques", explicó a Xinhua el director de la División Territorial de Comercializadora de Combustibles, Rigel Rodríguez.

Rodríguez, un ingeniero químico de 46 años, está a cargo desde hace cuatro décadas de las labores de la base, una instalación decisiva para la generación eléctrica en la isla caribeña.

Parado al frente de una gran explanada donde estaban los cuatro tanques destruidos, ahora cubierta de piedra caliza, el especialista detalló los planes de recuperación, cuyo costo, sin haber concluido todos los proyectos, se calcula hasta el momento en unos 91 millones de dólares y 4.000 millones de pesos.

Además de los tanques, en la instalación resultaron destruidos el laboratorio de análisis físico-químico, todos los talleres de mantenimiento, una subestación eléctrica y buena parte de las líneas de tuberías y válvulas para trasegar el combustible.

Con la destrucción de una línea de tuberías, de los cuatro muelles de la base quedaron fuera de servicio el uno y el dos, que al ser de aguas profundas pueden recibir buques de hasta 150.000 toneladas.

El ingeniero comentó que con la instalación de 700 metros de tuberías de 20 pulgadas lograron reiniciar las operaciones en el muelle uno, lo que permitió mantener a la base en operaciones de manera paralela a la reconstrucción.

"Hemos seguido descargando barcos de combustible y cargando otros con crudo nacional para poder garantizar la generación eléctrica del país", recalcó.

El proceso de recuperación en marcha, que debe durar unos cuatro años, además de construir cuatro nuevos tanques, incluye un nuevo laboratorio de análisis físico-químico, la red de tuberías que conecta a los muelles y la rehabilitación de los talleres de mecánica, electricidad y maquinado.

Tras el incendio, la Base de Supertanqueros de Matanzas dispone de 38 tanques para el depósito de diferentes tipos de combustible con una capacidad de almacenamiento estimada en más de 500.000 metros cúbicos.